Un domingo por la tarde de un mes de julio cualquiera. Paseamos por Barcelona en busca de la sombra para conseguir una tregua de este calor sofocante. Nuestros pasos nos llevan hasta la zona del Born y las terrazas están todas llenas, igual que la mayoría de locales. Son casi las 20:00 y los turistas extranjeros ya están dando buena cuenta de sus cenas.
Deambulando por las calles nos topamos con un local en el que hay gente en la calle esperando. Siempre es buena señal… El local desde fuera no llama especialmente la atención. El típico bar estrecho, pero esta a tope de gente. El nombre del local es TAPEO AMB DANIEL RUEDA. Miramos la carta y buscamos alguna referencia en internet, que en ocasiones ayuda y en otras casi es mejor no mirar. Páginas como TripAdvisor pueden darte una idea totalmente equivocada de un local ya que las reseñas que encontrareis son totalmente contradictorias.
Preguntamos y nos dicen que podremos entrar en 10 minutos, así que esperamos. Mucha gente entra a preguntar, pero tienen que salir y esperar. En la zona de la barra las mesas son para dos personas. La barra está completa también. Al final del local hay un pequeño rincón donde hay una mesa de 4 personas y un poco más al fondo un comedor con más mesas para 4.
Al sentarnos pedimos la bebida y nos dejan la carta con 4 páginas de tapas y sugerencias. Nos decantamos por unas croquetas de jamón ibérico, unos huevos estrellados con butifarra negra y unas patatas bravas. Cuando nos toman nota añadimos en el último momento un platillo de jamón de bellota, que siempre va bien.
En un momento nos llegan las croquetas. Sencillamente buenas. En su punto y con un sabor perfecto entre el jamón y la bechamel. De momento vamos bien. Uno de los camareros de la barra se lleva el plato vacío y otro llega con las bravas desde el fondo del local. Al ver las patatas Mireya y yo nos miramos. La verdad es que parecen patatas fritas cuadradas y punto, pero al probarlas junto a la salsa… Impresionantes… Especialmente buenas. Tal vez un poco duras, pero se compensaba con la salsa.
Pero lo mejor estaba por llegar, y lo hizo con el jamón y los huevos estrellados… Otra ronda de bebida para acompañar un jamón de bellota (será complicado encontrar un jamón de bellota que no cumpla con las expectativas) y unos huevos estrellados que en mi modesta opinión, son los mejores que he probado jamás. La butifarra negra desmenuzada y mezclada con el huevo frito y las patatas fritas, dejaba un gusto en la boca que hacía tiempo que no recordaba. Impresionantes…
Y con el estómago lleno (sobradamente lleno…) pedimos la cuenta. Incluso hicimos una porra para ver quien se acercaba más al total. ¿38€? ¿42€? ¿48€?… Al traer la cuenta un total de 41,20€ (podéis ver la cuenta en la imagen). Así que contentos, con la panza llena y habiendo pasado un buen rato callejeando por el Born de Barcelona.
CONCLUSIÓN
Un sitio altamente recomendable. Si volvemos pediremos menos comida, ya que o bien el jamón o bien las croquetas, nos las podíamos haber ahorrado. La atención del servicio exquisita, tanto por parte de la encargada del local como por parte de los dos camareros que nos atendieron. El local tranquilo, incluso estando lleno de gente. Ambiente agradable y distendido, pudiendo tomar algo rodeado de la gente más variopinta de Barcelona y del extranjero. Volveremos.
Como nota negativa el precio del pan. Cuatro o cinco trocitos de pan con tomate, tipo «costa» por el que pagamos 3,00€.
TAPEO amb Daniel Rueda
Carrer Montcada, 29
08003 Barcelona
Telf. 933101607
Admite reservas.